Bacalar es uno de los lugares de la Riviera Maya que no podés pasar por alto. Su laguna turquesa de aguas dulces, su centro histórico, sus muelles, cenotes y una variedad de opciones culturales y gastronómicas, hacen de este pueblo mágico un espacio natural para descansar y disfrutar a pleno.
Allí estuvimos por varios días y elegimos descansar en Casa Buena Onda, donde Yessica y Yanis, dos franceses casi mexicanos, nos hicieron sentir realmente como en casa durante toda la estadía.
Un espacio familiar con tres habitaciones, cocina para compartir, lindo jardín y unos desayunos riquísimos. Una casita simple pero con mucho amor, ubicada a solo doscientos metros de la laguna más linda que conocimos en México.
Tranquilo y familiar
Si hay algo que identifica a este hospedaje, es la paz y la calma que siente en todos sus rincones. Son tres habitaciones privadas, las cuales comparten un mismo baño, completo y super amplio. Cada una está equipada con aire acondicionado (necesario en el verano de Bacalar), guardarropas y camas muy cómodas para descansar sin problemas.
El ambiente es muy tranquilo. Desde que te levantas hasta que terminas tu día cansado de tanta actividad, el lugar es el indicado para tener un sueño bien profundo y despertarte al día siguiente como nuevo.
Un jardín de relax
Uno de los espacios más lindos de Casa Buena Onda es su jardín. Varias mesitas con sillas, hamacas y una energía tan relajante que hasta a veces dan ganas de echarse una siesta debajo de los árboles.
Algunos lo usan como espacio de coworking para trabajar o hacer videollamadas. Otros lo eligen para leer, o bien, para pasar el rato haciendo nada más que disfrutar.
Desayunos de otro mundo
Nada mejor que el hospedaje incluya desayuno, y si es abundante y exquisito, muchísimo más.
Yessica es la encargada de esta parte y sabe hacerlo muy bien. Una variedad de frutas, tostadas de aguacate y hubo, café orgánico, pancakes con miel y un postre de banana y galletas que no puede más de rico.
Un desayuno super abundante y hecho con tanto amor que vas a querer seguir volviendo por más.
Un paseo en bicicleta
Porque además de hospedaje y ricos desayunos, Casa Buena Onda ofrece bicis para rentar y recorrer Bacalar de punta a punta. Para nosotros es la mejor forma de hacerlo (saludable para nuestro cuerpo y también para el medio ambiente).
Durante nuestra estadía, las bicis nos llevaron a ver amaneceres y atardeceres increíbles, a pasear en velero, a hacer kayak, y al Cenote Azul, uno de los más lindos que conocimos en toda la Riviera Maya.
