Ubicada en las sierras de Ecuador, a pocas horas de Quito, Baños de Agua Santa es considerada como la puerta de entrada al Oriente.
Rodeada de montañas, de cascadas y del imponente volcán Tungurahua, es una de esas ciudades salidas de cuento, donde cada recoveco invita a explorarlo hasta el final y donde la naturaleza muestra su belleza al ciento por ciento, sin guardarse nada.
También es conocida como la capital de la aventura de Ecuador. Un lugar que brinda una increíble variedad de actividades para los amantes de los deportes extremos y, sobre todo, de la naturaleza.
Aquí te contamos qué lugares no podés dejar de visitar al momento en que decidas viajar a Baños de Agua Santa.
Un pintoresco centro
Si bien es un pueblito pequeño y con pocos habitantes, el centro de Baños tiene todo lo necesario para que puedas disfrutar de la ciudad sin excusas.
Durante el día, sus plazas y peatonal son las más concurridas por quienes salen a hacer mandados, pero también por aquellos que eligen descansar o leer el periódico bajo la sombra de algún árbol.
La Basílica Nuestra Señora del Rosario de Agua Santa es la majestuosa catedral de la ciudad, y la cual es visitada por cientos de turistas durante todo el año.
Por la noche, sus bares y restaurantes abren de lunes a lunes con opciones gastronómicas y cocteleras para todos los gustos. Eloy Alfaro es la calle de las discotecas, que se enciende al caer el sol para recibir a turistas que llegan de diversas partes del mundo para disfrutar del lado nocturno de Baños.
Al estar muy próxima a la Amazonía, la lluvia y la humedad acecha constantemente a la ciudad de Baños, por lo que siempre es recomendable salir con paraguas o capa de lluvia para no terminar empapado.
Ruta de las cascadas
Para nosotros, lo mejor de lo mejor en Baños.
Es un recorrido que se puede hacer en auto, en bus o en bicicleta.
Si estás en auto, es sencillo hacerlo, recorriendo la ruta y parando en cada una de las cascadas para contemplar y tomar las mejores fotografías.
Otra de las opciones es tomar el bus que te lleva directamente al Pailon del Diablo, la más conocida de todas. Eso sí, vas a tener que resignar las cascadas anteriores y posteriores a ésta.
Hacer la ruta de las cascadas en bicicleta no tiene precio. Es que además de ser la manera más económica, ecológica y saludable, es la que más te permite disfrutar el recorrido.
Nosotros elegimos esta última opción y no nos arrepentimos por nada del mundo.
Salimos desde Great Hostels, donde rentan bicis por $5 a los huéspedes, y allá fuimos.
Cascada de Ulba/ Cascada El Silencio
La primera cascada fue la de Ulba. Allí el ingreso es un poco extraño, ya que a simple vista pareciera un espacio privado porque hay varios tejidos que atravesar. Puede ser que aparezca de repente algún lugareño que se ofrezca a acompañarte por algunas monedas, o que llegues por tu cuenta sin mucho problema. De cualquier forma, vas a llegar a la imponente cascada de Ulba.
Nosotros tuvimos la fortuna de encontrarnos a Matías quien no solo nos llevó a conocer esta cascada, sino que además nos guió hasta la de El Silencio, que queda a unos pocos metros, pero que muchos se la pierden ya que no hay señalización visible para llegar.
Cascada Manto de la Novia
Seguimos viaje, y nos fuimos a conocer la tercera cascada, una de las más turísticas: Manto de la Novia. Una imponente caída de agua transparente, que se despliega, como su nombre lo indica, como un manto de novia.
Cascada Manto de la novia. Foto: Revista Milénica
Allí se puede ir en teleférico (o tarabita como lo llaman en Ecuador), y cruzar al otro lado del Río Pastaza, pasando muy cerca de la cascada.
También se puede recorrer el Sendero de los contrabandistas, un histórico pasaje por el que pasaban los contrabandistas de licor de caña, escapando de los guardias que los controlaban.
Cascada El Pailón del Diablo
Sin dudas, la más imponente y visitada de toda la ruta. Incluso del Ecuador.
Es una cascada mágica con una potente caída de agua a la cual es necesario llevar una capa de lluvia para no mojarse.
Esta es un poco más aventurera, ya que, para ingresar, hay que caminar alrededor de cinco kilómetros, por un sendero rodeado de una increíble vegetación que invita a mirarla por horas.
Una vez que llegas, debes abonar una entrada de $1 dólar por persona, y empiezas a subir hasta llegar a las cuevas, las cuales hay que atravesar para poder ver la cascada de cerca y sentir su fuerza.
Es un lugar impactante y muy energético, que te deja sin aliento durante el resto del día.
Cascada Machay
Es la última de la ruta de las cascadas.
Dicen que lo más lindo, siempre espera al final. Y con Machay esto sin dudas, se cumple.
Para llegar, dejamos nuestras bicis en la entrada, donde hay un pequeño restaurante. Allí nos cobraron $1 dólar a cada uno, y enseguida bajamos por un hermoso sendero, entre puentes colgantes y escaleras empinadas. Son alrededor de 15 minutos caminando, hasta llegar a la imponente Cascada Machay, que te deja boquiabierto con sus 40 metros de altura y el arcoíris atravesándola.
El río donde cae, es de aguas turquesas, y en el lugar hay tanta paz, que da para llevar la mantita y quedarse durante varias horas a respirar el aire puro mientras se disfruta del ruido del agua.
A la vuelta, si estás muy cansado o se hizo muy tarde, hay camiones que salen desde la entrada del Pailón del Diablo y te dejan en el centro de Baños junto con tu bicicleta. Cobran entre $1,50 y $2 dólares por persona.
Al extremo
Mientras recorres la Ruta de las Cascadas, vas a pasar por todo tipo de juegos extremos que se encuentran al costado de la ruta.
Así que si sos un amante de la adrenalina, no podés poderte el canopy, la bola extrema, los puentes colgantes, la tarabita o teleférico, canyoning, rafting y zipline. Hay muchas opciones para elegir, según el nivel que busques.
Casa del Árbol
Otro de los imperdibles en la ciudad de Baños.
Además de ser un lugar bonito, como de cuento, es muy económico.
Cómo llegar
Puedes hacerlo caminando o en bus, según tu estado o las ganas que tengas de moverte.
Si eliges la caminata, son 3 horas de recorrido por senderos muy tranquilos, aunque a veces empinados. Para no pasarla mal, te aconsejamos que lleves ropa liviana, un buen calzado y el infaltable poncho de lluvia. Nunca se sabe cómo sigue el día en Baños.
Si prefieres hacerlo en bus, hay varios horarios de salida por día (5:45, 11, 14 y 16 hs.) Puedes tomarlo en la parada que se ubica en calle Pastaza, entre Martínez y Rocafuerte. El bus tiene un costo de 1 dólar por persona y te deja en la entrada del complejo.
Nosotros lo hicimos unos meses antes de que empiece la cuarentena, por lo que te recomendamos que chequees toda esta información cuando estés allí.
Para ingresar a la Casa del Árbol, el ticket tiene un costo de 1 dólar por persona, el cual te permite hamacarte en el columpio del fin del mundo, subir a la Casa del Árbol, hacer canopy y practicar equilibrio tocando las nubes.
Te recomendamos que antes de hacer el tour, chequees que haya un lindo cielo, porque después es lo que va a determinar la vista que tengas desde las hamacas.
No olvides tus gafas de sol y el protector solar el sol se siente más fuerte en lo alto.
Si querés saber más sobre este mágico lugar, te invitamos a leer Baños de Agua Santa: Volar entre las nubes
Mirador Cruz de Bellavista
Es uno de los miradores que permiten ver la ciudad de Baños desde arriba y que regala un paisaje increíble.
La entrada se encuentra en la última calle del Sector Bellavista, vía a Runtún. Allí verás un sendero que conduce hasta el mirador. El tiempo de ascenso estimado es de media hora, cuarenta y cinco minutos.
Una vez allí, verás la Cruz de Bellavista, desde donde tendrás una imponente vista a toda la ciudad de Baños de Agua Santa.
Imprescindible llevar agua, ropa liviana y buen calzado.
Otras propuestas
Si andás con mucho tiempo, también podés visitar la Cascada de la Virgen, un ícono de la ciudad, donde podés tomarte fotografías increíbles.
Si querés un poco de relax luego de tanta caminata, cerca de la Cascada se encuentran las famosas Termas de la Virgen, un conjunto de piscinas con aguas termales, ideales para visitar por la noche y tomarse un merecido descanso.
En caso de ir en familia y llevar niños, el Ecozoológico y el Parque Aventura son dos buenas opciones. Están ubicados camino a Patate, un pueblito cercano a Baños, al cual se puede llegar caminando tranquilamente.
Cerca de estos dos lugares, está la Cascada Inés María, la cual no recomendamos. Primero, porque el lugar está muy abandonado, los pastos muy largos y nos cobraron $1,50 a cada uno para ingresar. Segundo, la cascada es lo menos parecido a una cascada. Solo una olla con una caída de medio metro de agua. Fuimos muy entusiasmados, pero volvimos desilusionados. Por eso, para quienes estén por visitar Baños de Agua Santa, recuerden el nombre de este lugar, para no llevarse un fiasco como nosotros.
Dónde dormir
Great Hostels, el mejor hostel de Baños. Un lugar tranquilo y con mucha onda, donde los desayunos son interminables y riquísimos, y cada noche hay un evento diferente para disfrutar y compartir en pareja o con amigos.
Foto de portada: Unsplash by Robinson Recalde