Si hay un lugar que no podés perderte en el caribe mexicano, es la hermosa Isla de Holbox. Un pequeño pueblito al cual se llega por medio de un ferry, cruzando el mar desde Chiquilá. Bueno, aunque también está la opción de volar desde Cancún, aunque un poco más costosa, pero seguro mucho más rápida y cómoda.
Holbox, que en lengua originaria significa «Hoyo Negro», fue hace mucho tiempo tierras de piratas. Está ubicada a 165 kilómetros de Cancún, justo donde se unen el Golfo de México con el Mar Caribe. Es por eso que sus amaneceres y atardeceres son increíblemente hermosos y mucha gente llega para disfrutar de la entrada y la salida del sol.
Aguas turquesas y transparentes, un incomparable mar piscina, bancos de arena fina y una imponente naturaleza, hacen de Holbox uno de los inflamables al momento de conocer esta parte de México.
Ahí llegamos la última semana de octubre y nos quedamos hasta el 10 de noviembre. Momento ideal para disfrutar de lo último de la bioluminiscencia, sin el calor y las lluvias de la no tan recomendada temporada de verano que se extiende de mayo a mediado de octubre.
Y, si bien la mayoría la visita por uno o dos días, tenemos que decirte que no es tiempo suficiente si buscas disfrutarla al máximo. Porque aunque sea un lugar pequeño, la isla tiene mucho por conocer.
Caminar por los bancos de arena
Se los conoce como Punta Mosquito, aunque la verdadera Punta Mosquito está más adelante, pasando el manglar, y solo se llega en embarcaciones.
Aunque si buscas caminar por los bancos de arena mientras el sol se asoma de a poco, este lugar es impresionantemente increíble.
Cerca de las 8 de la mañana (dependiendo siempre de la marea), se empiezan a visualizar los bancos de arena frente a los últimos hoteles que integran la zona hotelera.
A partir de ese momento, podés empezar a caminar los dos kilómetros sobre el mar, a unos doscientos metros de la orilla. Algo muy mágico.
Cerca de las 11 el sol comienza a pegar cada vez más fuerte, por lo que siempre recomiendan salir antes de esa hora. Además, después del mediodía la marea empieza a subir y, probablemente, tengas que volver nadando con tus pertenencias en la cabeza.
Descansar cerca del mar
Holbox tiene infinitas ofertas en hotelería. Hay hostales, hoteles boutique, casas vacacionales y hoteles de lujo.
Mientras estuvimos en la isla, tuvimos la suerte de conocer tres hoteleros super tranquilos y muy cerca del mar, para pasar unos días inolvidables.
Sirenas Caribbean
Es una casa enorme con muchas habitaciones y un hermoso jardín. Ideal para quienes buscan tranquilidad y conexión plena con la naturaleza. Está ubicada a cien metros del mar y a trescientos del centro.
Podés encontrar toda la información en este link
Cozy Rooms
Otra de las opciones es Cozy Rooms. Un complejo de diez habitaciones ubicado a solo cincuenta metros del mar, y en una zona super tranquila del pueblo.
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Blatha Tropical Rooms
Un hotel boutique simple pero super cómodo. Rodeado de naturaleza y a pocos metros del mar. También está muy cerca de Punta Cocos, donde se ven los mejores atardeceres de Holbox.
Ofrecen café y té por las mañanas, y también tienen bicicletas para rentar y recorrer la isla.
Si querés reservar tus días en este lugar, acá te dejamos el link
Comer delicioso en Alta Gula
Si algo no falta en la isla son los lugares para comer. Desde desayunos y almuerzos, hasta cafés y cenas, Holbox está inundado de propuestas gastronómicas. Aunque, como en todos lados, hay que saber elegir.
Tuvimos el placer de conocer Alta Gula, una esquina donde fusionan riquísima comida argentina y venezolana.
Julián es su creador, un argentino que se enamoró a primera vista de Holbox. Miguel y Nico son los cocineros y hacen platos exquisitos.
Probamos las empanadas, la milanesa de pollo con puré y la arepa de tinga de jamaica. Todo hecho por manos argentinas y venezolanas.
Tienen mucha variedad de todo, así que vale la pena sentarse a elegir con tiempo.
Alta Gula se encuentra en la esquina de Carito y Porfirio Díaz, a cien metros de la plaza central.
Visitar el refugio animal y pasear a un perrito
El refugio de animales de Holbox alberga unos cuarenta perritos, más de veinte gatos y todo tipo de aves. Hasta tienen mapaches, iguanas y algún que otro animalito de la zona.
Es que sus fundadores son puro amor y aman ayudar a los animales. Es por eso que hace algunos años abrieron este espacio que se solventa con la ayuda de la comunidad y algunas donaciones.
Una de las actividades que ofrecen a quienes llegan a conocer el lugar, es la posibilidad de elegir uno de los perritos y llevarlo a caminar por la playa y el pueblo.
También podés adoptar el que más te guste, y llevarlo a tu país, en caso de no vivir en México.
Si querés conocer más de lo que hacen en Refugio Animal Holbox y cómo podés ayudarlos, te invitamos a seguir su cuenta de Instagram haciendo click acá
Ver un atardecer en Punta Cocos
Lo que distingue a Holbox de todo el caribe mexicano, es que es el único lugar donde se pueden ver los amaneceres y atardeceres sobre el mar.
Cada día en la tarde, una gran cantidad de turistas y locales, camina durante unos kilómetros para llegar hasta Punta Cocos. Aunque algunos también lo hacen en bicicleta.
En el lugar hay solo un pequeño bar para tomar y comer algo mientras esperas la caída del sol. Pero podés irte preparado con tu comida para quedarte hasta antes de que se haga de noche. Eso sí, no te olvides de llevarte de nuevo todo lo que va con vos.
Sorprenderte con la bioluminiscencia
Es uno de los atractivos más interesantes de la zona. La época más fuerte es de junio a septiembre, aunque en octubre quedan algunos resabios de este impresionante fenómeno.
Y si bien hay tours en lancha que te llevan al medio del mar, la bioluminiscencia se encuentra perfectamente en la orilla, sobre todo en los lugares donde no llega la luz artificial y solo se aprecian la luna y las estrellas.
Recorrer el pueblo en bicicleta
Porque si bien la isla no es muy grande, a veces las distancias de un lugar a otro son bastante extensas. Y como solo existen carritos de golf, y los taxis son poco accesibles, qué mejor que recorrer el pueblo en bici. Una manera saludable y ecológica de conocer Holbox de punta a punta.
Nosotros la rentamos en el Hotel Blatha, donde podés llevarla por 4, 8 o 24 horas, según los planes que tengas.
Tomarte fotos en los murales de la isla
Si hay algo que caracteriza a Holbox, es su infinidad de murales repartidos por todo el pueblo. Porque no solo están en las paredes del centro, también los vas a encontrar en las diferentes playas, y muchas veces hasta donde pocos llegan.
En este post les mostramos diez murales que nos encantaron y que, inevitablemente, no podíamos dejar de llevarnos un recuerdo de cada uno.