Los “smoothies” o batidos se han vuelto muy populares en nuestro país. Al comienzo eran consumidos mayormente por las personas que deseaban hacer régimen, deportistas y hasta famosos por sus reconocidos beneficios para la salud.
Se trata, en pocas palabras, de un simple licuado de frutas, con el detalle interesante de que también son combinados con verduras frescas y, en muchos casos, con semillas. Por otro lado, una de las cualidades del smoothie es que podés hacerlo con frutas congeladas, así le das ese toque cremoso, suave y fresco, sobre todo en épocas de calor.
Si estás buscando una nueva forma de desayunar o de merendar, saciando tu apetito de manera saludable, ingiriendo nutrientes, vitaminas, minerales y fibra natural en un solo vaso, podés empezar probando estas combinaciones:
Frutillas y banana
- 1 taza de frutillas
- 1 banana
- 1 taza de líquido
- ½ cuchara de semillas de chía
- Para los que se animen, 1 taza de espinaca fresca
Batido Verde
- 1 taza de ananá
- 3 hojas de lechuga
- 1 taza de mango cortado
- 1 cucharadita de jengibre
- 1 taza de líquido
Palta + banana
- 1 banana
- 1 palta
- 1 taza de ananá
- ½ cucharadita de semillas de amapola o chía
- 1 taza de líquido
Avena y manzana
- 1 taza de leche vegetal o agua
- 3 cucharadas de avena
- 1 manzana roja
- 3 dátiles sin carozo para endulzar
- Canela, vainilla
Batido de yogurt griego y chía
- 1 pote de yogurt griego
- 1 banana congelada
- 1 cucharita de vainilla
- 1 cuchara de semillas de chía
Verde power
- 2 tazas de agua fría
- 1 taza de espinacas
- 1 taza de lechuga cortada
- ½ tallo de apio
- ½ banana
- 1 pera
- Jugo de limón (un poco)
Naranja fresca + zanahoria
- 2 vasos de jugo de naranja
- 1 zanahoria
- 3 dátiles para endulzar
- 1 cucharadita de semillas de amapola
Batido fresco de ananá y durazno
- 1 taza de ananá
- 2 duraznos
- 1 taza de líquido
- 1 cucharadita de semillas de lino
Recordá que la receta base del batido siempre debe contener líquido (agua, leche o leche vegetal), frutas naturales o congeladas y verduras frescas. Además, es ideal que lo hagas y consumas en el momento, de lo contrario perdería sus propiedades.
¡Ahora, manos a la obra y a licuar se ha dicho!